PEKÍN, – El presidente de China, Xi Jinping, dijo el martes al jefe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) -de visita en Pekín- que su gobierno confía en ganar la batalla contra el coronavirus del «demonio» que ha causado la muerte de 106 personas y se está propagando por el mundo.
Cada vez más países están planeando evacuar a sus ciudadanos de Wuhan, la ciudad de 11 millones de habitantes donde se inició el brote. Un avión privado con personal del consulado estadounidense dejará la zona el miércoles, dijo una portavoz de la embajada norteamericana en Pekín.
El jefe de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, y Xi discutieron formas de proteger a los ciudadanos chinos y extranjeros en las áreas afectadas por el coronavirus y «posibles alternativas» a evacuaciones, dijo un portavoz de la OMS.
«El virus es un demonio y no podemos dejar que el demonio se oculte», dijo Xi, citado por la cadena estatal de televisión.
«China reforzará la cooperación internacional y acoge la participación de la OMS en la prevención del virus (…) Creemos que la OMS y la comunidad internacional proveerán calma, objetivos y disposiciones racionales y China confía en ganar esta batalla contra el virus», declaró.
La comunidad internacional está cada vez más alarmada por el impacto del coronavirus en la segunda mayor economía del mundo, que impuso restricciones de viajes y extendió las vacaciones por el Año Nuevo Lunar. Las bolsas globales caían nuevamente, los precios del petróleo operaban en mínimos de tres meses y el yuan sufrió su mayor baja en lo que va del año.
La semana pasada, un panel de 16 expertos independientes de la OMS resolvió que aún no era apropiado declarar una emergencia internacional por el brote. El portavoz del organismo dijo que el aumento de casos y muertes en China no necesariamente ameritaba esa decisión.
Normalmente, la OMS busca promover la cooperación y evita ponerse en conflicto con las naciones con las que está cooperando, ya que se arriesga a una reacción que puede socavar la entrega de ayuda humanitaria.
CONTAGIOS
El virus con síntomas parecidos a los de una gripe se ha esparcido al exterior, con casos reportados recientemente en Sri Lanka y Alemania. Pero ninguna de las muertes se han producido fuera de China y casi todas ocurrieron en Wuhan.
La OMS dijo que solo uno de los 45 casos confirmados en 13 naciones fuera de China involucró transmisión directa entre humanos, en Vietnam. Pero un funcionario japonés dijo que también había un caso sospechoso de contagio directo en ese país.
Hong Kong, el centro financiero envuelto en intensas protestas en los últimos meses contra el gobierno de Pekín, anunció el martes sus planes de suspender algunas conexiones de ferry y trenes de alta velocidad hacia la China continental.
Los servicios de tren bala serán suspendidos desde la medianoche del jueves y el número de vuelos también se recortará.
Tailandia confirmó otras seis infecciones entre los visitantes procedentes de China, llevando su número de casos a 14, la mayor cifra fuera de territorio chino. Las regiones del extremo oriental de Rusia cerrarán sus fronteras con China hasta el 7 de febrero, informó la agencia de noticias Tass, tras citar al gobierno regional.
Wuhan, donde el virus aparentemente saltó hacia los humanos desde un mercado ilegal de animales, ha quedado prácticamente bajo cuarentena, sin que sus habitantes puedan usar el transporte, salir de la ciudad o congregarse.
Decenas de millones de otras personas en la provincia de Hubei -que alberga a Wuhan- están viviendo con restricciones de viajes mientras las autoridades tratan de contener al virus.
La cifra de muertos hasta el martes era de 106 personas, desde los 81 fallecidos reportados el día anterior. El número de casos confirmados en China ascendió a 4.515 al lunes desde 2.835 el día previo, de acuerdo a la Comisión Nacional de Salud.