Ministerio afirma extensión “Quédate en Casa” y “FASE 1” constituyen una decidida protección para los hogares y empleados más vulnerables
El Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo evaluó el impacto de la pandemia en la pobreza y el empleo con la investigación reciente «Covid-19 bajo la lupa - Efectos de la COVID-19 en la pobreza monetaria, la desigualdad y el mercado de trabajo».
Santo Domingo.- El Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo calificó como positivo que el programa “Quédate en casa” sea extendido hasta abril y que continúe dando apoyo a las familias más vulnerables, así como “FASE1” para los trabajadores y las trabajadoras, debido a que constituye una decidida protección para los hogares y la empleomanía más vulnerable ante la crisis de la Covid-19.
El programa “Quédate en Casa”, puesto en marcha a raíz de la pandemia COVID-19, terminaba en agosto pasado y fue extendido a diciembre de 2020. Sin embargo, aún con las limitaciones presupuestarias del Estado dominicano, el Gobierno ha realizado un gran esfuerzo para extenderlo desde el pasado 4 de enero de 2021, en apoyo a la seguridad alimentaria y la protección social de los hogares dominicanos, manteniendo un nivel básico de consumo en la economía.
En días pasados, el presidente Luis Abinader encabezó una rueda de prensa, en la que se precisó que las condiciones de acceso a los programas de asistencia social son revisadas para eliminar los abusos del pasado y romper con el clientelismo, dotando a ambos programas de mayor transparencia y mejorando la articulación con otros programas del Gobierno.
Un reciente estudio del Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo evaluó el impacto de la pandemia en la pobreza en el país. La investigación «Covid-19 bajo la lupa – Efectos de la COVID-19 en la pobreza monetaria, la desigualdad y el mercado de trabajo», se desprende que el impacto de la crisis provocada por el COVID-19 ha sido principalmente urbano y femenino.
Históricamente las mujeres han sufrido tasas de pobreza monetaria superiores a los hombres y el efecto de la COVID-19 a junio 2020 ha mantenido e incluso aumentado esta diferencia. Para junio 2020, había 117 mujeres pobres por cada 100 hombres pobres. A su vez, el cierre de las escuelas provoca un aumento del trabajo de cuidado desarrollado principalmente por las mujeres.
El aumento de las horas de trabajo de cuidado no remunerado se asocia a una disminución de las oportunidades de las mujeres en el espacio laboral remunerado. Sigue siendo un reto desarrollar políticas públicas para enfrentar la feminización de la pobreza de forma efectiva que se tomarán en cuenta en el diseño del nuevo programa “Supérate” que se pondrá en marcha a partir de mayo 2021.
El mayor aumento de pobreza en junio 2020 se dio en el este del país pasando de 19.5% a 31.7 %, equivalente a 12.2 puntos porcentuales (p.p.). El macrorregión del este está constituida por las regiones de planificación de Yuma e Higuamo.
En el caso de Yuma, las principales fuentes de empleos son el comercio y la hostelería, los sectores económicos más afectados por la crisis. Las microempresas, es decir, aquellas que cuentan con 10 trabajadores/as o menos, han sido las que más empleo han perdido durante el confinamiento.
La priorización de las microempresas en los programas de crédito ha sido acertada debe ser fortalecida. El Gran Santo Domingo es la segunda macroregión que presenta una alta severidad de la pobreza, presentando un aumento de 7.5 puntos porcentuales.