Que estés en un confinamiento voluntario u obligatorio y, por lo tanto, separado físicamente de tu pareja, no implica que la relación corra peligro, siempre y cuando ambos estén dispuestos a dedicarse el tiempo para lograr que funcione, y estos consejos de expertos podrían ayudar a lograrlo.
Asumir la distancia
Lo primero, es asumir que estamos en esta situación, a distancia. Como recoge la psicóloga Varinia Signorrelli, es vital reconocer que el estar separados va a transformar la relación, pero no tiene que ser malo. Es solo aceptar que no va a ser igual, y que sí hará falta poner de nuestra parte para que funcione.
Esto incluye reconocer que la distancia física no tiene que implicar un distanciamiento emocional, y con la cantidad de herramientas digitales que tenemos a la mano, de hecho podemos estar más cerca que antes, si trabajamos en ello.
Comunicación
Si la comunicación es importante en una relación de pareja, con el distanciamiento es primordial, y como recoge la psicóloga y experta en relaciones de pareja y sexualidad Constanza del Rosario, es la base de la cercanía emocional, y lograría ‘acortar’ la distancia física que nos separa. Así, prestar atención, escuchar y compartir conversaciones entretenidas y profundas es importante.
Susan Trombetti, experta en relaciones y CEO de Exclusive Matchmaking, recomienda que hablemos de nuestras emociones de forma honesta y clara. Eso implica compartir el miedo, angustia, soledad o aburrimiento que podamos estar sintiendo por la situación, y no solo de cómo están como pareja o de las situaciones que vives día a día. Es parte de asumir lo que está ocurriendo y acompañarse.
Aquí es importante la escucha activa, como recoge Nan Wise, Doctora y terapeuta sexual. Es decir, tomarnos el tiempo para escuchar al otro sin otra intención. Para ello recomienda que dediquemos momentos solo para hablar y escuchar, sin estar haciendo otra cosa (como ver la televisión o cocinar).
Pero hacen falta límites
Con tanto ‘tiempo libre’ que pueden tener algunos durante un confinamiento, podemos estar tentados a mandarnos mensajes o hacernos llamadas todo el tiempo. Pero, como señala Wise, hace falta entender que el que tú estés libre no significa que el otro lo esté. Por eso es bueno establecer qué tanto es cómodo para ti y no frustrarte si para el otro no es igual, o si no responde a tu mensaje al minuto de que lo enviaste.
También es importante, sobre todo si llevan poco tiempo de salir juntos, establecer qué es cómodo para ti y qué partes de tu vida íntima te son cómodas compartir con el otro, sobre todo a la hora de hacer videollamadas. No a todos nos gusta saber que el otro está en el baño mientras hablamos, o que nos vean mientras nos estamos lavando los dientes.
A la vez, no se olviden de tener tiempo para sí mismos. Que puedas establecer que a ciertas horas estarás dedicándote a otras actividades y no para hablar, y tampoco frustrarte con los horarios del otro. Es cuestión de hablar sobre hablar.
Compartan actividades
Liz Colizza, terapeuta matrimonial, nos recuerda que compartir experiencias con tu pareja aumentaría la cohesión de la relación, lo que se traduce en realizar actividades o intereses juntos. Por ejemplo, pueden ver una película, dibujar, hacer ejercicio, cocinar o tomar algún curso.
En pocas palabras, compartir no tiene que ser solo hablando, sino haciendo algo juntos.
Tengan citas
Wise recomienda que a pesar de la distancia, planeen tener citas románticas. Esto implica quizá compartir una cena o un rato previamente planeado. Y esto incluye arreglarse como si fueran a salir, flirtear un poco, y ser creativos.